
Este interesante artefacto cumple las ambiciones del azul se mire por donde se mire. Por un maná para jugarlo y otro para activarlo, podemos o bien robar una carta o bien subir a la criatura objetivo a la mano de su propietario.
Sin ser ninguna bomba (bueno, en esencia es una bomba de éter), puede resultar bastante útil a multitud de barajas de control.
1 comentario:
buena carta pero solo para ciertas estrategias
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