De entrada, pagar por una tierra parece una idea un tanto descabellada, pero si pensamos que al final es poco más o menos lo mismo que las tierras que entran giradas y que te obligan a subir una tierra a la mano, pues tampoco está tan mal.
Y es que una vez bajada, da un maná de cualquier color sin daño, ni contadores ni nada que se le parezca. Es especialmente útil en las barajas modernas tricolores o de todos los colores (que de todo se ve ya), sobre todo si la combinamos con el Reflecting Pool.
Además, al contrario de lo que suele suceder con las tierras que dan maná de varios colores, es común.
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